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¡Celebra las fiestas patrias jugando y aprende el valor de las tradiciones chilenas!

Las fiestas patrias son una gran oportunidad para enseñarle a los niños la importancia
de las tradiciones de nuestro país y para que conozcan el origen de los juegos
chilenos, muchos de los cuáles son un legado de los pueblos originarios y se practican
hasta el día de hoy.
Nada más entretenido que aprovechar el “18 de septiembre” para organizar una
competencia familiar y disfrutar jugando a la rayuela, el trompo, carreras de sacos,
entre muchos otros. La lista es infinita pero hemos seleccionado 4 entretenidos juegos
para conocer más en detalle. Estamos seguros que todos los papás han jugado al
menos, un par de veces, a muchos de ellos.


El luche
Según cuenta la historia, habría llegado a Chile traído por los misioneros jesuitas que
lo practicaban en sus momentos de ocio. Hoy lo juegan principalmente las niñas y
consiste en trazar en el suelo, divisiones horizontales y transversales, dentro de las
cuales se anota un número al que se lanza un tejo (pedazo de teja) o piedra
redondeada y plana. Cada niña, saltando en un pie, debe lanzar el tejo con ese mismo
pie, al casillero inmediatamente adyacente, hasta llegar al último espacio, denominado
cielo.

Corre el anillo
Es un juego de origen español, donde los niños con las manos semiabiertas, simulan
haber recibido un anillo entregado por otro participante con va con las palmas de las
manos unidas, pasa de mano en mano, hasta depositar el anillo en alguien que guarda
el secreto. Luego un elegido del grupo debe adivinar quien lo tiene y si no lo logra
debe dejar una prenda, la que puede recuperarse tras hacer una penitencia. El que
adivina pasa a ser el que el que “corre el anillo”. La gracia del juego son las
penitencias que generalmente son muy divertidas.

Volantín
Este juego llegó a Chile en el siglo XVIII y su origen se atribuye a los monjes
Benedictinos. Durante la Colonia, era muy popular ver volar por el cielo cientos de
volantines de colores, fabricados por los mismos niños con papel de seda y finas
varillas de coligüe. También se le añade una cola de tiras de papel para hacer
contrapeso y mantenerlo quieto, o bien para ponerlo a movedizo.

Las bolitas
Este juego de origen griego y romano, llegó a Chile con los conquistadores españoles.
Permanece casi sin variaciones desde tiempos coloniales. Existen diferentes formas
de lanzar las bolitas y cada jugador afina su técnica, tirándolas con la mano o desde el
suelo. Hay una gran variedad de formas de jugarlo: la hachita y cuarta, troya, hoyo,
los tres hoyitos, la capital, el pique, el montoncito o la ratonera. Para desviar la
puntería, se decían palabras mágicas y se realizaban toda suerte de morisquetas para
distraer al jugador.

Fuente: www.patrimoniocultural.gob.cl