El verano es la época más entretenida del año para salir al jardín y divertirse jugando al aire libre, en contacto con la naturaleza, bajo un chorro de agua, en el pasto o en la playa.

Es sin duda, una de las estaciones del año que permite jugar más libremente y crear entretenidas actividades. Jugar con agua es uno de los panoramas favoritos de los niños ya que además de refrescarse, genera nuevas sensaciones, emociones y experiencias. Ya sea con juguetes de agua o libremente, el agua aporta diversión y mejora la percepción de los sentidos, como el tacto.

Los invitamos a aprovechar estos días de altas temperaturas para crear juegos y actividades con juguetes de agua como barcos de plásticos, baldes, figuras o remolinos para que la experiencia sea aún más entretenida. Generalmente, los juegos de agua son de colores llamativos lo que los hace aún más atractivos para los niños pequeños. Recuerda siempre supervisar las actividades, ya que por muy poca agua que tenga un recipiente o una piscina puede causar un accidente.

Jugar con agua, estar en contacto con el sol en las horas apropiadas para recibir su vitamina D y pasar tiempo al aire libre tiene múltiples e importantes beneficios para que los niños se mantengan sanos.

Durante esta época, los niños juegan y se mueven más intensamente al aire libre, aumenta la actividad física y disminuye el sedentarismo y el riesgo de enfermedades como la obesidad.

El contacto con la naturaleza aumenta también la curiosidad, creatividad y el pensamiento crítico habilidades fundamentales para el aprendizaje y también mejora el ánimo, reduce el estrés, la depresión y nos ayuda a estar más positivos.

¡Este verano salgamos a jugar al aire libre y a gozar el agua y la naturaleza!